Jorge Zabalza: “Es hora de producir símbolos de resistencia, después vendrán la acción ideológica y el sembrar semillas revolucionarias”

 Jorge Zabalza: “Es hora de producir símbolos de resistencia, después vendrán la acción ideológica y el sembrar semillas revolucionarias”



Por Carlos Aznárez

Resumen Latinoamericano
24 de febrero de 2021.
Jorge “Tambero” Zabalza sigue siendo una referencia a la hora de hablar de pensamiento crítico y de Revolución en el continente. Desde Santa Catalina, en su Uruguay natal, Zabalza sigue teniendo la misma fuerza ideológica como cuando se alzó en armas con los Tupamaros. Reconoce que algunos de sus compañeros cambiaron de montura y se dedicaron a administrar el capitalismo, como Pepe Mujica y otros, pero él sigue pensando en que la juventud tarde o temprano va a dar la sorpresa. Y por sobre todo, es un convencido que las grandes batallas se libran en las calles.
Con Zabalza hablamos del Uruguay actual, de la LUC, de la violencia policial y las rebeldías que como pequeñas lucecitas van prendiéndose aquí y allá.

-Nos interesa tu opinión sobre la LUC, la Ley de Urgente Consideración, que tanto está dando que hablar allí
-Surgió como un invento de la reforma naranja de 1967, amparó todo el proceso de autoritarismo y luego el golpe de Estado. Pacheco Areco se afirmó en algunos artículos que protegían acciones autoritarias del Poder Ejecutivo y uno de esos era la capacidad que se le otorgaba por la constitución al presidente de la República para presentar Leyes de Urgente Consideración (LUC)
-¿Esta ley qué implica, cómo se gestó? Supongo que en complicidad de unos y otros, no solo de los partidos Blanco y lox Colorados.
-No, por supuesto. No solo los Colorados y los blancos. En Uruguay gobierna una coalición de 5 partidos, el Partido Nacional (Blanco), acompañado de el Colorado, el Partido Independiente, otra fracción muy pequeña (Partido de la Gente) y el partido militar, encabezado por alguien que luce un apellido ilustre del fascismo uruguayo, Manini Ríos. Esta es la coalición que gobierna y proclama tener un discurso liberal, muy liberal, que apuesta a la libertad individual, pero más allá de todo eso, representa un proyecto antipopular. Proyecto que consiste en rebajar la masa salarial, reduciendo el poder adquisitivo del salario, para permitir la concentración mayor del capital y aumentar su rentabilidad. Es el proyecto que se viene dando en toda América Latina, Europa, China, en todos lados. Ahora se empezó a aplicar libremente a partir de las elecciones. Esta coalición, apuesta descaradamente al proyecto de la línea del acuerdo de Washington, que antes se proponía de manera más atenuada. En realidad, es el mismo proyecto neoliberal del Frente Amplio, que lo aplicó de manera más atenuada y más sensible hacia las organizaciones sociales. Pero en definitiva es el mismo proyecto.
-En ese sentido, lo que denuncia la Coordinadora contra Toda la LUC, esta ley acentúa la represión contra el movimiento popular.
-Lógico. En sus inicios, cuando (el presidente) Lacalle presentó la LUC en el Parlamento, el Frente Amplio la consideró una ley regresiva, retrógrada, proclive al autoritarismo, porque tiene más de 500 artículos, es una ley monstruo. Un portaaviones jurídico. El Frente pronto cambió su bancada parlamentaria y cambiaron de posición y entraron a considerar artículo por artículo y terminaron votando en contra en general cuando se presentó la ley, pero aprobando el 50% de los artículos. Así fue que aquello que era retrógrado, derivó finalmente que era mitad retrógrado y la otra mitad iba en dirección correcta. Entonces, esto implicaría que la coalición que nos gobierna presentó un 50% de la LUC que iba “en dirección correcta”, en dirección del pueblo.
La lucha es contra TODA la LUC
-¿Esto es lo que avaló el Frente Amplio?
-Así es, un disparate desde el punto de vista ideológico. En realidad, los parlamentarios tendrían que haberse levantado de la sala y dejar que la coalición multirreaccionaria aprobara por sí sola una ley tan retrograda. No lo hicieron y entraron a cavilar en los pasillos y despachos parlamentarios y aprobaron el 50%. Así pusieron al movimiento social en un apriete. Al igual que en Argentina con el peronismo, aquí todas las organizaciones sociales, el cooperativismo de vivienda que acá es muy importante, el movimiento feminista, todos los movimientos populares de Uruguay, se consideran frenteamplistas declarados. Entonces, quedaron en una disyuntiva. Sus bases estaban contra la LUC, pero resulta que el Frente Amplio ya había votado la mitad de la LUC, esa ley retrógrada. Esto terminó, con la imposición por parte del Frente Amplio de solamente rechazar o hacer referéndum contra 135 artículos. Es decir, el núcleo que ellos consideraban retrógrado, ahora se reduce a menos de un tercio de la LUC. Eso despertó, en una cantidad de militantes sindicales y populares, un gran rechazo. Así surge la Coordinadora contra toda la LUC. No cuenta con los fondos que tiene la Central de Trabajadores (PIT-CNT) que dicen haber invertido medio millón de dólares en la campaña, mientras nosotros estamos remando con esfuerzo. Acá en el lejano oeste de Montevideo se ha formado una agrupación, un zonal que está activo y que entiende, que más que tratarse de una disputa jurídica contra la ley, lo importante es volver a agrupar, nuclear a los luchadores más combativos del movimiento social, de los sindicatos, los movimientos sociales, los feminismos, los de la vivienda, la lucha en defensa del medio ambiente, de los movimientos barriales. Empezar a renuclearnos porque nos tenemos que enfrentar a una serie de medidas muy reaccionarias que vienen en cadena.
-Describí esa medidas, o por lo menos las más graves.
-La primera de ellas es la reforma de la seguridad social que va a ser totalmente neolibeal y perjudica a todo el pueblo. El hecho es que hay una serie de artículos de la LUC que respaldan la acción policial, que amplían la defensa propia del policía, consideran que, en el ejercicio de su autoridad, cualquier cosa que vos le digas, si vos estas sentado en un estadio de fútbol y el tipo viene y te pide el documento y vos le digas “no, no tengo, porque vine a ver el futbol”, bueno ya eso es considerado un desacato, desacato verbal contra el ejercicio libre de la autoridad policial. Entonces, ese respaldo jurídico, más el respaldo político que tiene la policía para reprimir por parte del ministro del interior y por parte del presidente y de los medios de comunicación reaccionarios, eso hace que los policías actúen, sobre todo en los barrios, con desconsideración, con mucha violencia.
-Recientemente hubo represión en algunos barrios populares.
-Últimamente se vio esto en un asentamiento de Malvín Norte, en el cual procedieron a disparar con perdigones contra tres mujeres que terminaron heridas, una con “munición no letal”. Esto es un nuevo eufemismo. Munición no letal, como la flecha, si te agarraba bien, tal vez te lastimaba un poquito, pero te agarra mal, te mata. Mirá, ahora en Catalunya, dejaron ciega a una militante. Tenemos los ejemplos de Chile, esta munición no letal ha matado a varios. ¿qué estamos haciendo? Es una onda mundial que no trata de humanizar al capitalismo, sino humanizar la represión, al salvajismo del aparato represivo.
-A propósito de estas acciones represivas, a la de Malvin Norte se le agregó otra en Pan de Azúcar, donde la intervención policial contra la gente fue brutal.
-En Uruguay la ofensiva reaccionaria es importante, porque el presidente suspendió la libertad de reunión. Primero, por 60 días ahora 30 días más y esto se aceptó porque dicen que se suspende la libertad de reunión para evitar las multitudes que contagien de Covid. La pandemia es usada como respaldo ideológico de medidas muy autoritarias. La policía va y actúa. ¿Qué van a hacer los jóvenes en verano? No tiene donde ir, porque está todo cerrado, por la pandemia. Se reúnen, bailan y tocan música en la rambla de Santa Catalina, y no puedes dormir, pero que le vas a hacer. Eso lograron: la gente se siente culpable de festejar y divertirse, los jóvenes en particular. Además, el vecindario se siente obligado para prevenir y defender su salud, cuidar la medida sanitaria. Si no se cumple con ello, llaman a la policía. Denuncian cualquier aglomeración y ahí la policía viene y actúa. En general, no hubo problemas, pero en determinado lugar se encuentran con jóvenes que, frente al autoritarismo por parte del aparato policial, reaccionan violentamente, se defienden. Eso ocurrió en los años 60 y ahora también. Pasa en Uruguay, en Buenos Aires, en Mendoza, en Salta, en Chile, Bolivia, en Catalunya, en todos lados.
–Quería tu opinión sobre cómo ves esa rabia juvenil que empieza a recorrer todo el mundo, rabia juvenil que apunta fundamentalmente con diferentes excusas: en Catalunya por la detención de un rapero, en Chile por todo lo que ha hecho Piñera, pero pasa también en Perú. Rabia que apunta a tres elementos: 1) no creen más en las instituciones, 2) no creen más en los partidos políticos tradicionales, incluídos los partidos de izquierda, ¿cómo ves esto? Hay mucha gente en la calle movilizándose contra la represión, pero no hay un instrumento político, que no debería ser partido, pero sí una instancia organizativa que sirva para canalizar esa bronca y que no termine en una nueva frustración.
-Como en 2001 y 2002. Ahora se tienen nuevas formas de organización. En Chile, por ejemplo, con Asambleas populares. Estamos hablando los viejos, pero son muy parecidas a las de los años 60. Expresiones de autonomía organizada que tuvieron nuestros pueblos de Latinoamérica, en aquellos años. Hay expresiones en los cuales los partidos viejos de izquierda, reformistas, el partido socialista, el comunista, perdieron legitimidad frente a las masas y las masas empezaron a recorrer otros caminos. Acá se terminó la democracia burguesa, la democracia liberal ¿votar, para qué? ¿Para llevar a un Bolsonaro o un Macri en el mejor de los casos? O a un Alberto Fernández, que los lleva por el mismo camino que Macri, pero de manera más edulcorada, más sensible para algunos problemas, pero que en definitiva termina teniendo un vacunatorio VIP, escondido en el Ministerio de Salud Pública. Acá pasa lo mismo: el Frente Amplio va perdiendo autoridad como en Chile le pasó a la Concertación Nacional, como perdió fuerza el Partido de Trabajadores (PT) en Brasil. Quién sabe si el PT podrá recuperar el prestigio que tenía sobre las masas. La gente está muy disconforme y ya no cree en las instituciones liberales. Que no le vengan con el cuento de los tres poderes del Estado, hay un solo poder y es el de la clase dominante, es el del capital. Se puede ejercer de una forma más descarada ese poder cuando está la derecha, cuando hay un Bolsonaro. O con moldes mejores, con discursos suaves y convincentes, como pasó con Tabaré Vázquez, Pepe Mujica o ahora con Alberto Fernández. No hace lo mismo Piñera, que es la continuidad de Bachelet, Bachelet vino precedida por Ricardo Lagos, y a Lagos lo antecedió Pinochet. En definitiva, están gobernados dentro de la misma Constitución, se amparan en las mismas leyes de la dictadura. La democracia burguesa va perdiendo arraigo y credibilidad, la gente se va dando cuenta y dicen “que me importan estos tipos”, y votan cualquier cosa. En conclusión: se pierde interés, se termina la expectativa de que los caminos de la democracia representativa liberal van a resolver algo los problemas más graves que tiene la gente. Puede haber alivio, claro, pero al poco tiempo viene el cimbronazo.
Entonces, en Uruguay la masa salarial ha disminuido, el poder adquisitivo de los trabajadores, de los jubilados, está reducido. Eso lleva a una descomposición social.
En todo esto hay también una responsabilidad nuestra. ¿Qué hemos hecho aquellos que tenemos la intención de la transformación revolucionaria? ¿Cómo hemos perdido predicamento entre la juventud y la masa vulnerada, las villas miseria, los asentamientos? Somos responsables de no haber sabido promover, instituir, un germen de poder popular.
-Es verdad, pero también cuenta que hemos tenido muchos palos en la rueda desde nuestro propio campo para hacer eso. Muchos colchoneros, muchos compañeros que prefieren construir la política del colchón que amortigua la posibilidad de mayores rebeldías. Y además la responsabilidad de cierta dirigencia de izquierda y del campo popular, que prefiere acomodarse en las cómodas sillas y sueldos del Parlamento y no ir a la calle a dar la pelea. La pandemia les vino bien para estas “iniciativas”.
-Acá les decimos “bomberos”. La izquierda ha llevado a la gente al parlamento a la gestión administrativa del estado. A partir de la presidencia de Tabaré y Pepe Mujica, el problema es cómo administrar el Estado, o sea, el capitalismo. En la película que Kusturika le hace al Pepe, que entre paréntesis está bastante mamado cuando dice: “sí, yo en algún momento fui revolucionario, pero ahora administro al capital”. Administran lo que les dejan administrar, y se conforman con eso, creen que toda la política es un discurso. Hacer política es hacer discurso de parlamento y negociar en parlamento y andar por los pasillos, negociar y sentarse en los despachos de los reaccionarios para negociar. Quién puede dudar en este mundo sobre quién decide qué, cómo, cuándo, dónde se produce, qué productos van a haber, qué recursos propiedad de los pueblos se van a extraer, ¿quiénes deciden? Eso lo deciden los grandes capitales, y ¿qué hacen nuestros presidentes, nuestros parlamentarios? Son meros mayordomos, son capataces de eso grandes capitales.
La política, entonces, se reduce a lo que decide Soros o Bill Gates. Esas grandes decisiones sobre la marcha del mundo luego las van ejecutando los distintos servidores que tienen. Entonces, después no se quejen de que la gente se cansa y salen a la calle, como salen en Perú y Colombia. ¡Hay que salir en Colombia con un sistema tan represivo!, y salen. ¡Hay que salir en Honduras o Guatemala. ¡Hay que salir a hacer marchas hacia los Estados Unidos desde Centroamérica, detrás de la panacea y la fantasía de que vamos a ir a ganar un peso allá! La gente está desesperada y eso da en cierta forma un clima de los años 68 y 69. Por un lado los gobiernos más autoritarios ya no necesitan dar golpes de estado, les alcanza con manejar el poder judicial y el palacio legislativo.
-Por un lado vemos la desesperación de la gente que busca un canal casi lindante con el anarquismo, expresiones de bronca sin partidos y sin instrumento político, pero bronca lógica al fin, y por otro lado, la extrema derecha que aparece no solo en Europa sino en América Latina. Allí está Manini Rios, en Argentina, Patricia Bullrich, Brasil tiene a Bolsonaro. Por ahí viene una disputa y creo que muchos y muchas jóvenes no están mirándose el ombligo. Valoro mucho que en medio de todo esto, tenga vigencia un discurso como el de Pablo Hasél, un compañero que viene lidiando con la canción, con el rap, contando verdades y dando propuestas de autodefensa o de solidaridad internacionalista, bajando línea anticapitalista con la canción, produciendo un fenómeno movilizatorio como el actual. No solo en Catalunya se habla de él como un símbolo. Tal vez la izquierda tradicional no lo ve, pero nosotros tenemos que poner el ojo en este tipo de cosas.
-Si creo que es hora de producir símbolos, símbolos de resistencia, después vendrá la acción ideológica y el sembrar semillas, revolucionarias. Pero los símbolos principales son la resistencia y la lucha, frente al autoritarismo, frente al poder represivo que tienen nuestros enemigos, nosotros no nos achicamos. Es decir, seguimos creyendo. Frente a la campaña ideológica del “quedate en casa para no contagiarte”, vamos a buscar formas de movilización que nos permitan rechazar esa cortina de humo que nos imponen desde el poder. La pandemia ha sido aprovechada ideológicamente por los más reaccionarios y la vamos a aprovechar nosotros también para movilizar. Cada vez que nos juntemos, respetemos el hecho del barbijo, el aire libre. Este 8 de marzo, las mujeres, el movimiento feminista, considero que debe salir a la calle, que no debe replegarse, sino que deben ganar las calles, organizadas, respetando reglas sanitarias, no por temores, sino para que la gente se sienta respetada en sus miedos, y poder vencerlos. Pero no por eso dejar de salir a la calle.
-Gracias Tambero, un gustazo escucharte.
-Nos seguiremos viendo, siempre en la misma.

DESOBEDIENTES - Jorge Zabalza

DESOBEDIENTES



La mira ideológica apunta a salir de la crisis concentrando la propiedad del capital y aumentando su rentabilidad. Un propósito que sólo se puede financiar achicando la parte del producto que corresponde a masa salarial e inversión social. Es la ley y el orden del quehacer político en el capitalismo y define dos sendas: o se transita por una de ellas o se lo hace por la otra, no es posible caminar por el medio.
En ese marco, más que un amontonamiento informe de normas, la ley de urgente consideración (LUC) es una estratagema de guerra para expropiar más masa salarial a la fuerza de trabajo. Por supuesto, para disimular su perversa intención, la aderezan con el discurso de la libertad individual y la democracia representativa, aunque, en el fondo, están intentando desvirtuar el espíritu de rebeldía.
Saben muy bien que el malón provocará descontento y, por eso, previendo las protestas masivas, están acostumbrando la población a la presencia militar y policial en los espacios públicos (recordar que la “acción cívica” era recomendada por la Doctrina de la Seguridad Nacional en los ’50). La pandemia fue utilizada para paralizar la lucha de los pueblos con un shock de miedo, con señales que abren caminos al autoritarismo y les permite testear reacciones en el campo popular.
Ahora saben que los parlamentarios progresistas, que podían estar en la primera línea, enfrentando el malón reaccionario, optaron por el pragmatismo y la conciliación:
rechazaron la ley en general, pero aprobaron casi el 50% de su articulado. Para su particular manera de ver el mundo, esos artículos habían perdido el carácter regresivo, concentrador y autoritario. El Mario Bergara redondeó la idea: van en la “dirección correcta” aunque hayan sido elaborados por la coalición multi reaccionaria.
¡Asombroso!
Rafael Michelini definió más claramente la concepción general: “No estoy hablando de los tres millones y medio de habitantes, ni siquiera de la mitad, pero con que en el Uruguay un 10% la pase muy mal los jóvenes van a salir y yo los prefiero juntando firmas. “(…)” Pasó en Chile, pasó en Colombia…Se juntan con el celular. Se juntan en un minuto. ¿Por qué no va a pasar en Uruguay?”. Michelini no percibe que más de ese 10% ya comen en las ollas populares, el conflicto social ya está instalado no le será fácil desalentar la indignación popular. Se han convertidos en bomberos que apagan llamas, pero dejan encendidas las brasas.
Con el progresismo atrapado en el trampero, los multi reaccionarios prosiguieron a paso redoblado su ofensiva contra el movimiento popular: aumentaron un 2% el IVA y las tarifas de los servicios públicos -un modo camuflado de recaudar más-, se pasó a medir por el índice medio de salarios el monto no imponible del IRPF, de costado preparan más privatizaciones en ANCAP y ANTEL y comenzaron a implementar la reforma de la seguridad social. La paralizante prudencia opositora está empedrando el camino hacia el infierno. No es posible defenderse del malón con buenos modales de liberales. Da bronca, mucha bronca.
Gabriel Molina (SUTEL) sintetizó el enojo predominante en 19 de los 50 sindicatos representados en la Mesa del PITCNT: “Me importa un carajo lo que el Frente hizo en el parlamento, porque el tema acá es mucho más profundo que la decisión que tomaron los legisladores nuestros”. Lo mismo sentían las bases de FUCVAM, FEUU y la Intersocial Feminista. Entonces, antes que la marea se hiciera tsunami, el progresismo atropelló la independencia política y finalmente la Intersocial y el Frente Amplio salieron unidos y adelante, juntando firmas contra 135 artículos. En un santiamén convirtieron más de dos tercios de la LUC en políticamente aceptables ¡milagro de milagros! “Por la forma en que se toma esta posición, pero también por el contenido que conlleva, dejó al descubierto que sobre los intereses de los trabajadores se ponen los intereses de un partido”, redondeó Lorena Lavecchia, presidenta del Sector Banca Pública de AEBU.
Estimulados por el enojo y la bronca decenas de luchadoras y luchadores sociales acudimos al llamado de las maestras en lucha contra toda la LUC. Ya somos cientos y pronto seremos miles. Son muchas las organizaciones sociales cuyas asambleas están decidiendo juntar firmas por las dos opciones: la total y la del tercio. Es un grito que dice ¡presente! “vamos a defendernos, ya lo hicimos cientos de veces, sabemos cómo hacerlo y no nos detendrán con transas moderadas”. Se proclama la voluntad de resistir a la manifiesta voluntad de la clase dominante: un acto político de doble
desobediencia: a los que quieren implantar las bases jurídicas del terrorismo y a los que transan con ellos.
No es una lucha fácil: “Gracias al terror a la pandemia, plantear salir a la calle y reunirse forma parte del ideario de ser un irresponsable. Hasta esa batalla tenemos que dar con los compañeros: que van a trabajar, pero no van a militar. Que van apilados en los ómnibus, pero no pueden ir a la plaza a tocar el tambor un sábado” agregaba
Lavecchia.
Sin embargo, es necesario darla: “No sólo porque implicará rebajas salariales, y más privatización y pérdida de soberanía. No sólo porque da el golpe de muerte a la educación, ya ninguneada sin el presupuesto necesario. El gatillo fácil, la reglamentación de piquetes sumado a las otras disposiciones de permitir la libre circulación, también es producto de 15 años de gobierno frenteamplista que sucumbió, -porque le convenía- a permitir ese discurso que, más temprano que tarde, nos llevaría a un gobierno “de mano dura”. Acá no hay inocentes, te diría”, finaliza Lavecchia la entrevista con “El Muerto”.
En el Oeste montevideano, tradición de lucha obrera y autonomía, se salió a pintar muros y rejuntar la militancia dispersa, a quebrar de hecho el “aislamiento social” respetando las medidas sanitarias. Se comienza a tender un cerco de pueblo embravecido para aislar a los dueños del Uruguay y derrotarlos, la misma estrategia que obligó la dictadura a retroceder.
Los dueños del Uruguay y su coalición multi reaccionaria comenzaron a trepar la cuesta hacia el autoritarismo… ¿culminarán nuevamente en terrorismo de Estado?
¡Alerta, compañeras y compañeros! las luchas que vendrán serán las más caborteras de la historia.

Jorge Zabalza

(recuadro): 
LOS MUROS EN LA LUCHA DE LOS PUEBLOS


El ser humano ha pintado y grabado sobre los muros desde épocas prehistóricas, para transmitir conocimientos y también como expresión de sus demandas económicas, sociales y políticas. Desde el hombre de las cavernas y sus pinturas de animales, plantas y del entorno que lo rodeaba, pasando por los muros pintados en Roma con las demandas de esclavos y plebeyos, los muros de la Revolución Francesa de “pan y muerte al rey”, a los muros pintados en el transcurso de la Revolución Rusa con la consigna de “paz, pan y trabajo”.
Los muros fueron siempre escenario de comunicación en el espacio público, construyen identidad y a través de ellos nos apropiamos de nuestro territorio y de lo público, nos ayudan a tomar conciencia de nosotros mismos, a qué clase social pertenecemos, unifican demandas y aspiraciones populares y nos llaman a la lucha social y política.
Detrás de los medios de comunicación hay clases sociales que los poseen, por ello, frente a la propiedad hegemónica de los medios audiovisuales (televisión, radios y diarios), los medios de desinformación que maneja la oligarquía, los trabajadores y sectores populares pintamos muros como forma de contrarrestar su mensaje y también como expresión de empoderamiento por los oprimidos de una zona, de un barrio, de una ciudad.
Pintar un muro es comunicar una injusticia, una demanda, que nos identifica como clase y también con una etapa de nuestra militancia, de nuestra niñez y juventud, dónde solo teníamos “Nuestros Muros”.
Es también una acción colectiva por excelencia, en una pintada se suman voluntades, se decide la consigna en forma democrática, se charla, se intercambia información, nos contamos anécdotas de viejas y viejos luchadores, de pintadas históricas y nos reímos de todo un poco.
En la dictadura era una acción en la que compartíamos riesgos, recordemos al compañero Medina que lo mataron por estar pintando un muro. No debemos olvidarnos jamás que nos disparaban y tiraban a matar.
Los militares tenían muy claro el valor de nuestros muros y también lo tiene claro la oligarquía, la derecha, no es casual que nos hayan vandalizado algunos muros que volvimos a pintar inmediatamente.
Ellos temen nuestros muros, temen al grito de guerra a las injusticias, al grito de libertad de expresión, al grito de rebeldía y al grito de que “¡no nos callarán!”.
Ellos nos quieren mudos, sumisos y obedientes, que sigamos tragándonos su televisión, sus radios y sus diarios, por ello cada muro que pintamos es mucho más que una pintada, es un símbolo de RESISTENCIA ORGANIZADA.

Hugo Ramírez






Entrevista: Confesión de un viejo tupamaro

 Entrevista: Confesión de un viejo tupamaro


Descríbanos su evolución política hasta ingresar al MLN
De niño comencé a concurrir y participar de un comité juvenil del batllismo, llamado Baltasar Brum, que tenia las propuestas más avanzadas del mismo, cuya evolución hacia un socialismo más vanguardista fue tronchada por la dictadura de Terra, así como la evolución del movimiento popular y sindical del 1969 fue frustrada por las tiranías legales de Pacheco y Bordaberry, pero sobre todo por la dictadura militar.
Cuando estaba en Preparatorios, que actualmente es segundo ciclo de secundaria(5º. y 6º.) tomé simpatía por el anarquismo, pero a un nivel básico.
Esto me llevó a una militancia primero en la asociación de estudiantes de educación física, de la que fui presidente, y luego en la asociación de profesores de educación física, el Centro de Profesores de Enseñanza Secundaria de Mercedes y la Federación de Profesores de Enseñanza Secundaria.
Como profesor de educación física en Mercedes atendía a escuelas de barrio, por lo que pude comprobar con indignación las condiciones deplorables de los niños de estas escuelas, en particular de la del Cerro, cuyos alumnos carecían de condiciones materiales mínimas para asimilar la enseñanza primaria. La deserción escolar iba hasta cerca del 50 % porque los escolares tenían que ayudar a parar la olla doméstica. Recuerdo que los padres les pedían a los maestros que en días de huelga no dejaran de atender los comedores escolares, porque era la única posibilidad de sus hijos de ingerir una comida decente. También los niños que concurrían a la plaza de deportes del barrio Artigas mostraban carencias evidentes.
Tuve el privilegio de contribuir con un artículo en el diario Época, que reunía a toda la izquierda radical del momento.

1- ¿Cómo, cuándo y porqué ingresó?
El MLN-Tupamaros nació en el año 65 a partir del llamado Coordinador, que agrupaba esencialmente a todas las organizaciones en torno al diario Época y que luego fueron puestas fuera de la ley por el gobierno de Pacheco. Ellas eran el Partido Socialista, el MIR(maoístas pro chinos), el Movimiento Revolucionario Oriental, liderado por Ariel Collazo, el Movimiento de Apoyo al Campesino, inspirado en los cañeros de Artigas cuyo líder era Raúl “Bebe” Sendic, y los anarquistas que no sé bien si estaban representados por la Federación Anarquista del Uruguay o por otra organización.
El Coordinador fue formado en defensa de todo el movimiento popular y sindical y todas sus luchas sin exclusión y en cierto modo en prevención de una intervención del fascismo de Brasil, que dio un golpe de estado en el año 1964.
Este Coordinador tenía una cohorte de acción directa cuyo nombre era Tupamaros, pero por lo tanto, no MLN.
Fueron los tupamaros del Coordinador los que realizaron el robo de las armas del Club Tiro Suizo en el año 1963, a partir del cual Sendic y otros compañeros quedaron clandestinos.
Volviendo a referirnos al año 1968, una gran cantidad de jóvenes reaccionaron frente al despotismo descarado del gobierno de Pacheco, quien era vicepresidente y ocupó la presidencia a la muerte de Gestido, caracterizado por la aplicación de las llamadas Medidas Prontas de Seguridad que eran levantadas por las cámaras legislativas y vueltas a imponer inmediatamente, de modo de que el poder legislativo estaba anulado en la práctica, lo que implicaba entonces una dictadura legal.
Las Medidas Prontas de Seguridad anulaban las garantías legales y permitían llevar a prisión a personas por mera sospecha, sin pasar por juzgado alguno, con lo que el Poder Judicial también quedaba anulado o reducido.
Ante estos abusos, como decía, una gran cantidad de personas, sobre todo jóvenes, sintieron la necesidad de demostrar en los hechos su indignación y disconformidad. Como el MLN ya estaba organizado, muchos lo elegimos para sumarnos a dicha organización.
Es importante destacar este hecho, porque fue Pacheco el mayor reclutador para el MLN, empujando a miles a sus filas, mientras que hasta ese entonces era casi inexistente, por lo menos en cuanto al número de integrantes. Es fundamental comprender que si cesaban o se negociaban las condiciones que lanzaron a todos esos jóvenes a la lucha clandestina, posiblemente habría obligado al MLN a negociar el uso de las armas.
Un político de veras, con mayor visión y comprensión, como por ejemplo Ferreira Aldunate, habría podido negociar, no sólo con el MLN, sino con todos los movimientos de acción directa. De hecho, lo menciono porque entiendo que él entabló conversaciones directas o indirectas con los compañeros.

2- ¿Cómo funcionaba la columna N 25?, ¿Cuál fue su breve historia? ¿Qué poder bélico tenían?
La columna nació de una controversia amistosa entre el Bebe Sendic y Víctor Mansilla, quienes, a partir de una sola columna del interior, formaron la columna del Norte y la columna del Sur, respectivamente, divididas por el Río Negro, quedando ellos dos como comandantes.
En casi toda su vida militante la columna operó en Montevideo, que ofrecía mejores condiciones para la guerrilla urbana, que fue la forma que adoptó el MLN desde el principio, pero se nutría con militantes del interior que operaban en la capital.
Fue recién a partir del Plan Tatú que la columna comenzó a operar más en el interior. Como ustedes saben el Plan Tatú consistía en mantener una serie de bases subterráneas, llamadas tatuceras, que podían albergar militantes en pequeño grupo o aislados, y equipos de combate.
Tal vez la acción mayor en la que colaboró la columna fue en la toma de Paysandú, en el año 1971, a pesar de que la capital sanducera queda en la parte Norte del país.
Yo no tuve el nivel de dirección como para conocer al detalle el armamento de la columna, pero de lo que vi, había armas cortas personales y otras incautadas y luego de la toma del cuartel de la Marina, llegaron armas largas que se distribuyeron en las columnas. También había algunos explosivos incautados a disposición.

3- ¿Qué función tenia Ud. dentro de la misma?
Como ustedes saben, el MLN se componía de tres sectores, en cada columna: Político, Servicio y Militar. El sector Político se ocupaba de elaborar las líneas teóricas directrices, el de Servicio de la logística, en particular de los escondites llamados “berretines” y de las tatuceras en el interior, y el sector Militar de las acciones directas. En la práctica en sector Militar abarcaba muchos más militantes que los otros dos juntos y éstos se ocupaban de cosas diversas, aun de colaborar con el Movimiento 26 de Marzo, a partir de la adhesión crítica del MLN al Frente Amplio en 1971.
Yo estaba encuadrado en este último sector, pero debido a mi actividad laboral que determinaba una amplia base de personas amigas y conocidas, pude realizar también muchos reclutamientos, sobre todo de jóvenes.

4- ¿Qué recuerda del atentado a Gustavo Criado? ¿le consta que Sendic estuvo en Mercedes?
El día del atentado a Criado yo estaba preso en la cárcel de Mercedes, que quedaba atrás de la Jefatura de Policía.
De noche, creo que a las 21, nos encerraban con llave, cada cual en su celda quedando las numerosas ratas que salían de los caños, como dueñas de los corredores fuera de las mazmorras.
Esa noche, como después supimos por los familiares, llegaron los militares histéricos y nos sacaron y nos formaron a todos en el patio interno de nuestro pabellón carcelario.
Nosotros no sabíamos nada de lo que había pasado, y al comprobarlo se fueron rabiosos, pero sin castigarnos, supongo que porque pesaba aún algo la protección de la justicia civil, por la que habíamos sido procesados.
De la presencia del Bebe en Mercedes ese día me enteré tiempo después por amigos del pueblo y luego por uno de los libros de Samuel Blixen.
También me enteré mucho después de que la caída de tantos militantes juntos en Mercedes, tiempo antes, había conmovido a los compañeros, quienes concluyeron que había tenido que existir una tortura brutal sistemática, y la intolerancia con los torturadores era una norma..

5- Las numerosas denuncias de torturas de la prensa en esa época…¿Qué opinión le merecen?
Hubo muchos miles de torturados en esa época, desde el año 68 y se incrementó a partir del ´72. Es muy difícil estimar la cantidad, pero se trata de varias decenas de miles. La prensa estaba limitada por decretos que hasta prohibían el uso de varios términos, así que opino que la cobertura y las denuncias de torturas fueron totalmente insuficientes.
Cuando yo estaba preso llegó a la cárcel de Mercedes la llamada comisión Erro, porque había sido este legislador, quien luego sufriera el correspondiente desafuero, quien promovió la misma, y yo pude declarar, así como los otros compañeros que estaban presos.

6- Comparte toda la historia oficial del MLN?
Supongo que se refieren a la trayectoria histórica de hecho de la organización. Mi opinión es que en la etapa de propaganda armada el MLN tuvo aciertos no solamente en la línea, sino que en acciones planificadas y ejecutadas tan magistralmente, como la de la Financiera Monty, que la propia organización tuvo que hacer la denuncia policial, porque los responsables de la firma querían evitar a toda costa todo control. También fueron magistrales las fugas tanto de hombres como de mujeres, y la toma del cuartel de la marina sin tirar un tiro ni víctimas de ningún tipo.
Hay quienes consideran que en esta etapa el MLN realizó política, sólo que por medios heterodoxos, ingeniosos y creativos.
El impacto a nivel internacional, sobre todo en la juventud de la época, fue enorme, con repercusiones en Europa y en Estados Unidos en particular, además de en el resto del continente, naturalmente.
Es extremadamente difícil, en estos tiempos materialistas, encontrar una sola persona capaz de gestos en que por principios e ideales arriesgue todos sus bienes materiales, su libertad, el contacto con familia y amigos y hasta su vida. En nuestro país hubo miles.
Ese fenómeno sociológico no ha sido correctamente apreciado en toda su magnitud en términos locales, aunque hay mucha más comprensión del mismo a nivel internacional, por ejemplo, en Europa.
En cambio, la etapa militarista y aparatista en que la organización se consideró un fin en sí misma, fue completamente errada y, como dije antes, condujo a una derrota militar muy dolorosa.

El MLN mismo no escribió ninguna historia oficial. Lo que hay en cuanto historia es fragmentario y múltiple. Están las Actas Tupamaras y numerosos libros de Zabalza y otros del renegado Fernández Huidobro y algo de Rosencof, así como otros muchos, pero nada aprobado orgánicamente.
En cuanto al estado y las fuerzas armadas, está el libro “Las Fuerzas Armadas al Pueblo Oriental” en el que figuro en la parte de penetración subversiva en la enseñanza, pero no creo que sea objetivo como historia del MLN. Hay un estudio universitario que incluye parcialmente un destello del MLN que es la obra monumental “Documento histórico sobre dictadura y terrorismo de estado en el Uruguay” cuyo responsable es el profesor Álvaro Rico.
No he leído otros historiadores como Carlos Machado que han escrito sobre el Uruguay moderno.

7- Hace pocos meses se nombra una calle Pascasio Baez…¿Qué opinión le merece ésto?
El único mérito conspicuo del pobre Pascasio es haber sido asesinado por mis compañeros, de lo que tomo mi parte de responsabilidad colectiva, aunque no comparto en absoluto. Considero que fue el error de una concepción militarista que valoró más una base que una vida humana, que dominó en ese período y que llevó al MLN a una dolorosa derrota militar con miles de presos, torturados y muchos muertos de la peor manera, en la tortura, compañeros y compañeras violados e irrecuperables sicológicamente, niños desaparecidos y vendidos, entre otros horrores. Estoy totalmente convencido de que el Bebe Sendic jamás lo habría permitido.
Es legítimo y obvio que la derecha quiera sacar dividendos del único caso de ese tipo, y lo hace entre otras formas, poniendo nombre a calles.
El otro caso conocido de ejecutado mientras estaba indefenso es el de Mitrione, pero ése obviamente no les sirve porque saldría su condición de instructor de tortura a la luz inmediatamente.
Si nosotros fuéramos a poner nombres de calles a todos nuestros torturados y muertos acopiaríamos toda la nomenclatura de una ciudad del interior entera, con el agravante de que la mayoría de nuestros muertos fueron después o a causa de brutales torturas.

8- ¿Tiene algún documento o algún contacto que nosotros podamos usar para ampliar nuestra investigación?
En este momento no se me ocurre, pero si se me aparece alguna idea, les puedo informar para colaborar con su interesante e importante pesquisa.

9- ¿Desde hoy como piensa que fue su actuación o el desempeño de la columna?
Yo soy un modesto militante que a lo sumo podría ser considerado un cuadro intermedio. Hice ingenua y fielmente todo lo que me tocó, sigo creyendo en la justicia social y en que una cárcel del pueblo a nivel mundial podría inquietar saludablemente a muchos criminales y genocidas impunes, que hasta reciben premios Nobel de la paz. Las instituciones internacionales como la ONU y la Corte Internacional de Justicia han sido corrompidas y domesticadas por los imperios y sus intereses bastardos y ya no imponen respeto alguno a los grandes delincuentes y genocidas internacionales como Bush, Tony Blair y los responsables de las guerras y masacres en Irak, Afganistán, Yemen, Siria, Libia y demás.
Sigo creyendo en las propuestas del Bebe Sendic en el estadio Franzini sobre reforma agraria, estatización del comercio exterior, no pago de la deuda externa, etc.
En cuanto a la columna, también considero que realizó lo mejor que pudo la parte que le tocó. Nuestra acción en nuestra zona se vio limitada por la comprensión de nuestro mensaje político por parte de la gente del interior, de lo que la organización es responsable.

12 ¿Si pudiera volver al pasado volvería a integrar la columna?
Sin ninguna duda. Cuando se dio el golpe de estado, varias personas vinieron a ofrecerse voluntariamente a mí para resistir, porque resistir la opresión y el despotismo es la tarea de todo ciudadano digno, y yo comparto ese principio.

Reflexión final abierta
Es fundamental analizar con objetiva serenidad la historia de los movimientos de acción directa nuestros, entre los cuales descuella el MLN-tupamaros. Es bastante claro que el actual sistema capitalista debe ser cambiado por sus desigualdades indignantes y por su desprecio por la ecología, que amenaza con la extinción de la especie humana entera y el próximo intento no debe terminar de una forma tan dolorosa como en los ´70 sino triunfante. Eso se lo debemos todos a las generaciones jóvenes.
En principio, me parece claro que la versión de los tupamaros del Coordinador es más unitaria y completa que la versión de los tupamaros del MLN, en la que milité.
El Coordinador, en primer lugar, abarcaba a todos los movimientos de acción directa y los articulaba entre sí. En segundo lugar, aspiraba a defender a todas las organizaciones populares sin excepción.
Por eso, yo considero tupamaros de acuerdo a la etimología original despectiva, acuñada por los ibéricos, o sea a los criollos rebeldes, por lo tanto a todos los movimientos de acción directa, a saber :aparte de los del MLN, a los anarquistas de FAU/ROE/OPR33, los guevaristas de MRO/FARO, los maoístas de MIR/PCR, entre otros.
Otra cuestión importante es que el MLN no tiene respuesta a una situación como la actual, desde la caída de la dictadura, cuando la acción armada sería altamente impopular y por lo tanto configuraría una línea política contraproducente.
La concientización del pueblo es obviamente la tarea fundamental de esta etapa.
Es necesario complementar la línea de propaganda armada para estos períodos pacíficos con una línea de propaganda activa sin armas, poniendo a las células y a los comités de apoyo, y aun a las masas militantes a arreglar calles, ayudar en el caso de desastres naturales como incendios e inundaciones, e intervenir en los barrios, los sindicatos, los institutos de enseñanza, los lugares de trabajo y la calle apareciendo dondequiera y cuandoquiera se necesite ayuda, dejando naturalmente un fuerte mensaje político revolucionario de concientización en todos los casos, con su rúbrica correspondiente.
El ingenio y el espíritu creativo de los tupamaros originales puede también utilizarse con ventaja en todas estas situaciones y ellos deben ser los primeros en acudir a prestar ayuda a los vecinos y los compañeros de liceo, facultad, lugar de trabajo, sindicato....
El MLN actual, con su frente de masas el MPP han sido domesticados por la línea miliquera y renegada de los Mujica(ex Pepe) y sobre todo Huidobro(ex Ñato) y son ahora funcionales al progresismo entreguista.
También es necesario tejer tácticas para utilizar los medios técnicos actuales como por ejemplo las redes sociales y todas las posibilidades que ofrecen las comunicaciones modernas y los medios cibernéticos, en otras palabras utilizar la tecnología como medio en la lucha de clases.


Ricardo Ferré
Playa Hermosa, febrero de 2021