Cara o cruz - Esteban Pérez

 C A R A  O  C R U Z



El pueblo le dio la espalda a Bolsonaro, perdió el hincha Nro. 1 de las dictaduras cívico-militares. Descomprime la angustia de muchos, pero no estamos felices; el adorador de Hitler obtuvo una importante representación parlamentaria y tres gobernadores más que Lula, lo que en un país federado significa mucho poder. Entre ellos nada más y nada menos que San Pablo, ciudad industrial, la que se suponía que con su proletariado organizado sería las espaldas y el ariete de Lula.

Pero no sólo por ésto, también por la fortaleza de Bolsonaro y la debilidad del presidente electo es que decimos que no nos sentimos felices. Lo decimos también porque el vicepresidente que fue electo junto a Lula no responde precisamente a los intereses populares, es claramente un representante de los intereses de los empresarios industriales y de los agronegocios, es decir un delegado de la oligarquía brasilera con muchísimo poder en su puño.

¿Quién ganó realmente las elecciones? ¿El PT del Lula proletario y de las masas empobrecidas o la oligarquía? Todo indica que veremos más de lo mismo. Un Lula tibiongo apostando al “mencelao” al “toma y daca” al “te doy para que me des”, lo que en nuestra modesta opinión abre dos puertas: la de la traición a las expectativas populares y la del gusano de la corrupción.

Sin desconocer que probablemente traerá un alivio a las masas hambrientas, difícilmente recorriendo esos caminos podemos esperar algún avance en los necesarios cambios de estructuras, en forzar en algo las columnas del capitalismo.

Recordemos que en el segundo gobierno del Frente Amplio, nosotros tuvimos un representante de los agronegocios como Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca  y padecemos hasta hoy las consecuencias de una reforma agraria exactamente al revés de las que proponían los programas de la izquierda. Se aceleró la acumulación de tierras en pocas manos y miles de hectáreas pasaron a pertenecer a verdaderas financieras multinacionales.

Pensemos entonces lo que puede suceder con un vicepresidente con esos antecedentes quien, según lo anunciado por Lula, será una especie de superministro que jugará en toda la cancha.

No logramos visualizar algún rayito de autocrítica en Lula porque el saldo de sus gobiernos fue la desideologización de las masas y la desmovilización de las mismas. Vuelve a buscar fortalezas en el concubinato con la burguesía menospreciando el trabajo ideológico en el seno del pueblo, una vez más se desprecia lo que pueda inclinar la correlación de fuerzas a favor del pueblo: el movimiento popular consciente, organizado y movilizado.

Sin ésto no sólo las transformaciones penden de un hilo, sino la propia cabeza de Lula.

Esperemos, en la cancha se verán los pingos …


ESTEBAN   PÉREZ

Contra la intervención militar en Haití

 Contra la intervención militar en Haití




Sr. Canciller de la República                                                                                                                           Montevideo, 20 de octubre 2022


Francisco Bustillo


PRESENTE


 

Las organizaciones abajo firmantes nos dirigimos a Ud. para transmitirle nuestro profundo rechazo al planteamiento de una nueva intervención militar en Haití, pidiendo que el Poder Ejecutivo asuma esta misma posición republicana.


El 1o de enero de 1804 Haití concretó la única revolución antiesclavista triunfante de la historia y se convirtió en la primera República independiente de América Latina y el Caribe. 

Fue por ello aislada y castigada por los distintos poderes coloniales e imperialistas hasta el presente.


Desde que los EEUU ocuparon militarmente Haiti (1915-1924), para poder perpetuar su nuevo poder neocolonial debió enviar  20 misiones del Consejo de Seguridad de la ONU, intercaladas con golpes de estado y hasta el secuestro del presidente Aristide, el único electo democráricamente por última vez en 2001.

Allí intervino la MINUSTAH y participaron las FFAAU, desde el 1o de marzo de 2004 hasta octubre del 2017.

Nuestro país tiene una experiencia directa en este tipo de intervenciones y sus consecuencias.  La MINUSTAH cometió masacres de población civil en Cité Soleil. Las FFAA uruguayas  reprimieron manifestaciones pacíficas  participando como policía en otro país de manera ilegal, y en numerosas violaciones de DDHH: violación de niños, niñas, mujeres y jóvenes, prostitución por comida, abandono de hijos sin protección paterna. Las tropas de Nepal de la MINUSTAH  introdujeron  el cólera, provocando entre 30 y 50.000 muertes. Ban Ki Moon reconoció la responsabilidad de la ONU pero jamás fueron realizadas las obras  de potabilización de agua y saneamiento para toda la población demandadas como reparación.


La Minustah fue utilizada por el Departamento de Estado para los fraudes electorales llevando al poder al nuevo partido PTHK neoduvalierista, de corte fascista. Sus tres gobiernos sucesivos (M.Martelly, Jovenel Moise, Ariel Henry) actuaron de forma autocrática, sin parlamento ni otros poderes de control, dejando a la población indefensa y entregando la economía y los ricos recursos del país a empresas e intereses extranjeros.


El terrorismo de estado  actual articula la fuerza de la Policía Nacional Haitiana con bandas paramilitares armadas desde  los EEUU, para acosar y aterrorizar a la población y congelar al movimiento popular siempre activo. Están probados los vínculos entre jefes de bandas y autoridades del PTHK y de la representante norteamericana de la BINUH, Helen La LIme.


El nuevo levantamiento popular que estalló el 12 de setiembre, se ha expresado a través de centenares de organizaciones sociales, políticas, religiosas, de DDHH articuladas entre sí, exigiendo :

* la renuncia de Ariel Henry, primer ministro impuesto directamente por los EEUU.

* el retiro del decreto de aumento de los combustibles en un 100%.

* el cese de la política de carestía, particularmente de los alimentos. 

* poner fin a la "Inseguridad planificada" causada por un centenar de bandas paramilitares y narcos que aterroriza a la población con masacres, secuestros,     quema de casas, violaciones y tiroteos por disputas de territorios. 

* el fin de la intervención extranjera y el respeto al principio de AUTODERTERMINACIÓN DEL PUEBLO HAITIANO


Ante la gravísima crisis política que vive Haití, el 21 de octubre el Consejo de seguridad de la ONU tratará el pedido de una nueva intervención militar extranjera solicitada por Luis Almagro desde la OEA, por distintos representantes norteamericanos, y por el ilegal e ilegítimo primer ministro Ariel Henry.


Nuestro pueblo se ha aferrado al principio de autodeterminación de los pueblos y éste debe ser definitivamente respetado. 

El pueblo haitiano deberá y desea contar, bajo su soberanía, con la cooperación solidaria internacional que sus autoridades legítimas determinen, pero rechaza radicalmente  la utilización del pretexto de la ayuda humanitaria internacional bajo la injerencia imperialista a la que es sometida desde hace décadas.. 


Como organizaciones populares exigimos:


 *DECIR NO A CUALQUIER INTERVENCIÓN EXTRANJERA MILITAR EN HAITÍ 

 *NO A LA PARTICIPACIÓN URUGUAYA EN UNA INTERVENCIÓN EN HAITI

 *SI A LA SOBERANÍA DEL PUEBLO HAITIANO!

 *SI A LA SOLUCIÓN Y GOBIERNO PURAMENTE HAITIANOS, SIN NINGUNA INJERENCIA EXTRANJERA NI DE LA ONU, OEA, O CORE GROUP 


Adjuntamos la Carta abierta al Secretario General de la ONU Sr. Antonio Guterres, de numerosas organizaciones sociales y políticas uruguayas, el día 24 de setiembre 2022 adhiriendo a la carta de decenas de organizaciones sociales y políticas haitianas indignadas por sus declaraciones sobre Haití.


¡VIVA LA RESISTENCIA DEMOCRÁTICA Y POPULAR HAITIANA!


¡VIVA HAITÍ LIBRE Y SOBERANO!


 

FIRMAS

CHOCOLATE POR LA NOTICIA

CHOCOLATE  POR  LA  NOTICIA



Uruguay tuvo el privilegio de darse a conocer en el mundo entero con el llamado “Maracanazo” en 1950.

Setenta y dos años después vuelve a ocupar un sitio de privilegio en los principales noticieros del mundo: se trata del “Astesianazo”, noticia de notoriedad que nos ubica entre los países de mayor entorno corrupto que rodea a determinados gobiernos del globo terráqueo.

No nos sorprende el notición aunque sí nos duele la turbia imagen en que se sumerge al país y por lo tanto quienes habitamos en él. 

Bajo las distintas divisas de gobiernos de la oligarquía en Uruguay los escándalos han sido comunes: infidencias, quiebres de bancos con ventas escandalosas, suicidios dudosos, torturas y desapariciones forzosas de ciudadanos, represiones violentas y desmedidas contra trabajadores y estudiantes, ministros que fallecen en circunstancias poco claras sin realización de autopsias, tierras de colonización otorgadas a quienes no integran “los más infelices” de la sociedad, exdiputados del partido del Presidente procesados por narcotráfico, notorios oligarcas exportadores de “sojaina” al por mayor tratados benevolentemente por la policía y la justicia, avionetas que se escapan y un largo etcétera más.

Todo este extenso corolario y muchas perlas más del largo collar no hacen más que confirmar que a nuestra oligarquía “se le pegan” como a un imán, todo tipo de individuos corruptos y pareciera que el pozo negro está tan lleno que desbordan las aguas servidas y no hay barométrica que pueda controlarlo.

El alma del sistema capitalista es de por sí injusta, corrupta y criminal. Es desde sus orígenes  una inmensa cloaca que ha acumulado a lo largo de los siglos crímenes, corrupción, explotación de seres humanos, destrucción de la naturaleza, sembrador de hambrunas y miserias de todo tipo. Fue creado por los ricos para los ricos con una única conciencia: el lucro, la acumulación de riquezas para una clase social, la burguesía, y su crema criolla, la oligarquía a expensas de trabajadores y cuando la naranja exhausta da ya poco jugo, no importa violar las reglas del juego, se mueve la pelota por el lado del crimen organizado utilizando  los vínculos con el Estado  para lucrar por medios “non santos”.

No importan los nombres de hoy, surgirán en el futuro otros “Astesianos”, otros “Bosch, otros “Mutios”, porque el problema es el sistema.

Mientras el pueblo organizado no logre tumbarlo y sustituirlo por otro más igualitario, más justo, seguiremos padeciendo sus consecuencias y seguirán existiendo “cámaras sépticas desbordadas” con escandalosas noticias.

No hay grieta, no hay fisura a zurcir. No es posible la conciliación de clases. Sólo desaparecerán las diferencias sociales con la derrota del capitalismo y su sustitución por el socialismo.


ESTEBAN PÉREZ

Yo soy Rufo...y no me entrego - Ricardo Perdomo

 Versión completa en .PDF, aporte de La Posta Porteña.
Ampliada y corregida por el autor

Yo soy Rufo...y no me entrego - Ricardo Perdomo



N A R C O C A P I T A L I S M O

 N A R C O   C A P I T A L I S M O



Más allá de las cada vez más claras incidencias del narcotráfico en los distintos estratos del Estado, hay que mirar el bosque.

El narcotráfico es un negocio sumamente rentable ocupando el cuarto lugar mundial en movimiento de dinero, generando ganancias anuales por un total de 650.000 millones de dólares. Es, por lo tanto, una exitosa multinacional, es capitalismo puro, crudo y sin disfraz. Los narcotraficantes poseen todos los elementos del mercado, como cualquier multinacional, es decir: producción, distribución y consumo. Para que tengamos una idea clara comparémoslo con la suma de facturación anual de los 20 clubes de fútbol más grandes del mundo, que alcanza los 16.700 millones de dólares.

Es cierto que el narcotráfico genera muertes (se estima en medio millón de personas que mueren anualmente a causa del consumo de drogas), pero esta es una fracción muy menor a las muertes causadas por el sistema capitalista en su totalidad. En 2020, por ejemplo, debido a las guerras fallecieron 50.000 personas; pero lo más horroroso, lo más criminal de este sistema corrupto son los ocho millones setecientos sesenta mil personas  que mueren por año de hambre en el mundo a consecuencia de este sistema apoyado en la explotación del hombre por el hombre y con el lucro como su valor principal. 

Según el último informe de las Naciones Unidas, las personas que padecen hambre en el mundo son 828 millones, lo que significa un incremento de 46 millones respecto al año anterior. El sistema capitalista en su totalidad con narcotráfico incluido es, por lo tanto, un sistema corrupto, injusto y criminal.

Sumemos a esto la destrucción sistemática de la naturaleza, la tala de bosques, la contaminación del agua de ríos y océanos en el afán de buscar el incremento del lucro, cueste lo que cueste, aunque el resultado final sea la extinción de nuestra especie arrastrando al mismo fin un incontable número de otras especies, las que pagarán las consecuencias de nuestra irresponsabilidad.

Preferimos afilar el hacha: optamos por gastar la vida en pos de talar el bosque, es decir el capitalismo.

Es y será una peripecia muy larga con avances y retrocesos, sufrimientos y derrotas, pero es la única salida de este laberinto de muerte, explotación y destrucción en el que nos tienen prisioneros las burguesías mundiales.

Los deportistas para obtener buenos resultados requieren  planes de acumulación de  fuerzas basados en una buena alimentación y desarrollo de la musculatura necesaria, invirtiendo horas y horas de sacrificio en rigurosos entrenamientos.

Los pueblos, para poder avanzar, deben recorrer procesos similares de acumulación. Deben desarrollar conciencia, unidad y organización.

El trampero de la burguesía, la vidriera del Parlamento como lugar de resolverlo todo, actúa de “achanchadero” de otrora luchadores sociales, con el perverso efecto desmovilizador de las fuerzas populares.

Sólo el movimiento social puede garantizar la realización de cambios profundos, según el momento será más o menos combativo, otras veces le tocará actuar de aguijón picaneando gobiernos progresistas que en la práctica han demostrado que terminaron maquillando el sistema, abriendo paso al desencanto y el retorno al gobierno de lo más retrogrado de las burguesías latinoamericanas.

La garantía será siempre pueblo organizado y movilizado. Le toca hoy desarrollar musculatura construyendo paso a paso intersociales que unifiquen todo el campo popular aunando las luchas rurales y urbanas.

Se te extraña viejo Artigas, se extraña tu vigencia en la memorable frase: “Nada debemos esperar sino de nosotros mismos”…


ESTEBAN PÉREZ

EE.UU., la OTAN y el régimen neonazi de Kiev culpables de la crisis en Ucrania

 

Ucrania:
EE.UU., la OTAN y el régimen neonazi de Kiev culpables de la crisis en Ucrania

por Luis Alfonso Mena
www.telesurtv.net/



Rusia plantea la desmilitarización y desnazificación de Ucrania, donde el régimen instaurado en 2014 reivindica políticos colaboracionistas de los ejércitos de Adolfo Hitler durante la Segunda Guerra Mundial.
La sumisión frente al imperio gringo y su maquinaria mediática mundial lleva a muchos a repetir, sin ninguna crítica, la narrativa de las potencias occidentales sobre lo que ocurre en Ucrania.
En realidad, lo que hace Rusia es proteger su territorio ante la amenaza nuclear diseminada a lo largo de países europeos integrados en la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Otan, y neutralizar, con operaciones especiales focalizadas, la infraestructura militar ucraniana establecida en centenares de bases militares repletas de toneladas del armamento surtido por el Pentágono y el Reino Unido.
En suma, decirle “basta” a la expansión del bloque agresivo de la Otan, cuyo jefe, EE.UU., se halla sediento de dólares para la industria militar norteamericana y afectado por una crisis económica de magnitud insospechada.
Además, y no menos importante, Rusia acude en ayuda de las repúblicas populares democráticas de Donetsk y Lugansk, independizadas de Kiev y situadas en la región oriental de Donbass, cuya población lleva ocho años siendo masacrada por el régimen neonazi instalado en el poder en Ucrania luego del golpe de Estado de 2014, que derrocó a Víctor Yanukóvich, golpe largamente patrocinado por la CIA y las potencias occidentales, con la participación de escuadrones paramilitares fascistas ucranianos.
La operación rusa en respaldo a las dos repúblicas autónomas, reconocidas por el presidente Vladimir Putin el lunes 21 de febrero, fue recibida con beneplácito por la población que la esperaba hacía años luego de padecer la persecución política y la violación de los derechos humanos, sociales y económicos del gobierno de Petro Poroshenko, surgido del golpe fascista, y del actual presidente, Volodimir Zelensky, un comediante de televisión convertido en “jefe de Estado” en el marco del régimen de extrema derecha imperante, pero, en realidad, un títere de EE.UU. y del Reino Unido.
Los sufrimientos de los cuatro millones de pobladores de la región del Donbass, cuyo idioma es el ruso, lo mismo que su idiosincrasia, cultura, tradiciones y sentimientos, han sido indecibles y condujeron a la independencia frente al poder central de Ucrania. Además, los habitantes de esta región se niegan a ser incorporados a la Otan y a la Unión Europea.
Más de 14.000 personas asesinadas, bombardeos y ataques diarios a manos del régimen y del llamado Batallón Azov (una agrupación nazi-fascista integrada por supremacistas blancos locales y de otros países incorporados al Ejército y al Ministerio del Interior ucranianos), la pérdida de sus pensiones, la ilegalización de la lengua rusa (¡qué tal esto!) y un sinnúmero de medidas han lacerado el alma y los cuerpos de millones de residentes de Lugansk y Donetsk.
El testimonio de Luis Hernando Muñoz, ciudadano colombiano residenciado en Donetsk desde hace 36 años, ha resultado impactante por la claridad de lo que realmente ocurre allí y el martirio que les ha tocado soportar durante ocho años. Se trata de un documento televisivo que dejó pasmados a los periodistas de Caracol, que cuando lo contactaron seguramente no se imaginaban la historia que se iba a revelar sobre la realidad de la sufrida región.
Por todo ello, Rusia plantea la desmilitarización y desnazificación de Ucrania, donde el régimen instaurado en 2014 reivindica políticos colaboracionistas de los ejércitos de Adolfo Hitler durante la Segunda Guerra Mundial, como Stepan Bandera, en cuyo homenaje el Parlamento de ese país decretó el 1 de enero, fecha de nacimiento del pro nazi, como día nacional.
Y donde proliferan agrupaciones de extrema derecha que glorifican, con el patrocinio del gobierno y de EE.UU., el nazismo, derrotar al cual costó la vida de más de veinte millones de soviético en la que se bautizó históricamente como la Gran Guerra Patria (1939-1945), legado traicionado por muchos hoy en Ucrania.
El objetivo de las potencias de Occidente, pues, es inundar de misiles de largo alcance la frontera con Rusia utilizando a Ucrania, pero para ello es indispensable hacerla miembro de la Otan.
Lo que está exigiendo Rusia de manera rotunda desde hace años, y que ha sido sistemáticamente desconocido por EE.UU., el Reino Unido y la Otan en general, es que se desista de esa iniciativa, que está en la estrategia de seguir desenterrando la anacrónica Guerra Fría surgida en 1949.
Para el gobierno ruso convertir a Ucrania en la plataforma de misiles nucleares, que en cinco minutos estarían impactando en Moscú, se constituye en asunto de supervivencia de su pueblo y su territorio, y de ahí su rechazo a la Otan. No es un invento de última hora de Putin.
Un hecho más: en 2014, la igualmente mayoritaria población rusa de la península de Crimea decretó, mediante referéndum, su separación de Ucrania y su regreso a jurisdicción de Rusia: el 95% de los participantes en la consulta votó por esa opción, lo cual exacerbó aún más a los nacionalistas de la ultraderecha de Kiev.
Moscú reclama, en el marco de los diálogos en marcha en Bielorrusia con Ucrania, el reconocimiento de Crimea como parte de la geografía rusa.
Las posiciones light
Ante este panorama complejo, sectores de la izquierda light y el progresismo liberal socialdemócrata en Latinoamérica hoy se acomodan y se suman a las sirenas de condenas occidentales a Rusia, sin ninguna contextualización histórica y geopolítica, porque creen que asumir esa condena suma votos, ambienta gobernabilidad o, por lo menos, neutraliza los rayos de las derechas.
Medios de comunicación que se reclaman “independientes” y hasta “alternativos” asumen, igualmente, el discurso de las grandes corporaciones comunicacionales de los países de la Otan, repiten sus líneas discursivas al pie de la letra y se prestan para reproducir imágenes claramente manipuladas del lado de la maquinaria de la guerra de desinformación.
Pero una de las posiciones más absurdas de los denominados progresistas es la de Gabriel Boric, el presidente electo de Chile, quien llamó a apoyar incondicionalmente el régimen neonazi de Ucrania, olvidando los tormentos de su pueblo en la Chile de 1973, torturado y masacrado por la dictadura fascista de Pinochet. ¡Qué contradictorio, que doloroso!
En esta época de ignorancias, “olvidos” y claudicaciones muchos no recuerdan, o nunca han denunciado, que los gobiernos surgidos en Ucrania después del golpe de Estado de 2014 ilegalizaron la lengua rusa que hablan millones de personas, especialmente en el este (región de Donbass), acabaron con las pensiones de trabajadores, encarcelaron a miles de opositores y sometieron al hambre y a los bombardeos cotidianos a millones de personas habitantes de las ahora repúblicas independientes de Donetsk y Lugansk.
Y, menos, recuerdan episodios tan terribles como la espantosa cacería de obreros desatada por las hordas nazis en 2014 que concluyó con el brutal asesinato de 50 jóvenes y trabajadores comunistas en la ya tristemente célebre masacre a la Casa de los Sindicatos de Odessa, incendiada con la gente en su interior.
Quienes hoy asumen el discurso de EE.UU. sobre el operativo ruso en Ucrania no recuerdan la actual infame guerra de los jeques árabes contra el pueblo de Yemen, la destrucción imperialista desatada en Libia, la brutal guerra de EE.UU. y otras potencias contra el pueblo sirio, las invasiones gringas a Irak y Afganistán.
Tampoco recuerdan (o se hacen los amnésicos) el despedazamiento por parte de la Otan de la antigua Yugoslavia en siete trozos, para lo que fueron necesarios 78 días incendiando Belgrado y otras ciudades de la patria de Tito, contra las que lanzaron 2.300 misiles, 14.000 bombas y 15 toneladas de uranio empobrecido que generaron una crisis ambiental del horror.
Los que hoy lanzan alaridos hipócritas sobre Rusia, callan ante los bombardeos diarios del régimen nazi-sionista de Israel, patrocinado por EE.UU., contra el pueblo palestino en su lacerado, invadido y dividido territorio (Gaza y Cisjordania), que dejan miles de víctimas. ¡Cinismo sin límites!
Tampoco recuerdan las invasiones a Panamá, Granada, República Dominicana y tantas otras agresiones atroces acometidas por el imperio estadounidense en nuestro continente americano… Ni hablan de la guerra de las Malvinas, en la que el imperio inglés asesinó a centenares de argentinos para mantener la posesión del territorio invadido.
Y, desde luego, no se atreven a denunciar los terribles bloqueos económicos e intentos de invasión contra Cuba, la República Bolivariana de Venezuela y Nicaragua, tres países solidarios en estos momentos decisivos con Rusia, al lado de la República Popular China y de Bielorrusia.
Para rematar, nos encontramos un artículo de Camilo González Posso (“Se escala la guerra imperial de reparto entre potencias capitalistas”), en la misma tónica de los centristas tan de moda hoy.
En principio lo que plantea González es la no alineación, es decir, tratar por igual a la Otan y su política hegemónica, y a Rusia, a la que se busca aislar. González reivindica a Henry Kissinger, quien, entre otras cosas, habla de rechazo a la anexión rusa de Crimea, con lo cual el articulista desconoce el referéndum de 2014 en el que, como mencionamos arriba, la población decidió su retorno a Rusia (Crimea fue “obsequiada” por Nikita Jruschov a Ucrania en 1954). Y ni una palabra sobre las masacres y limpieza étnica del régimen de Kiev contra las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk. González remata con el viejo argumento de no meterle ideología a esto. El discurso “profesional”.
La provocación del fantoche
Y mientras tanto, el régimen fantoche de Iván Duque, haciendo ejercicios con submarinos nucleares de EE.UU. en el océano Atlántico con la Armada gringa, otro acto de provocación contra Venezuela, como tantos que desde Colombia se han emprendido por los que usurpan el poder hoy en la Casa de Nariño y que tienen el cinismo ahora de hablar de invasiones e intervencionismo.
Ocultan que desde La Guajira colombiana se inició la nefasta Operación Gedeón, derrotada por Venezuela en las costas de la Guaira en mayo de 2020, y el circo en los puentes de norte de Santander para invadir, en febrero de 2019, a la hermana república con camiones de supuesta “ayuda humanitaria” y centenares de guarimberos armados con el auspicio de la Policía de Duque.
Que la Rusia de hoy no es socialista, sino un país que regresó al capitalismo, luego de la disolución de la Unión Soviética en 1991, se sabe. Pero eso no significa que, en el marco de las contradicciones del mundo capitalista de hoy, tengamos que desconocer asuntos fácticos denunciados por Moscú, empezando por la amenaza nuclear contra el pueblo ruso y la tragedia de ocho años en el Donbass.
Por el contrario, si algo está logrando esta crisis es que se empiezan a divulgar por el mundo estos hechos sobre los que la dictadura mediática internacional ha callado, y a pesar de la censura que los muy “democráticos” gobiernos de la Otan han impuesto para silenciar a medios como RT, Sputnik y otros. Cuando no hay argumentos, se recurre a amordazar la voz del mensajero. Y a producir un rosario de “sanciones” económicas, diplomáticas y de todo tipo, hasta deportivas, como las de la mafia de la Fifa.
Los agresores no son ni el pueblo ni el gobierno rusos, son la Otan, EE.UU. el Reino Unido y demás potencias occidentales y su títere, el régimen neo-nazi de Ucrania. Rusia y las repúblicas autónomas de la región de Donbass (Donetsk y Lugansk) se defienden.
Como dijera el analista chileno Alejandro Kirk, Rusia no cometerá el error de la Urss en 1939 de “intentar apaciguar al agresor con concesiones”. Moscú sabe que el régimen de Kiev es símbolo de arbitrariedad y cobardía. Ante la amenaza del bloque guerrerista de la Otan, Rusia tenía un dilema: se protege o claudica. Ya saben cuál es la respuesta.

fuente:
https://www.telesurtv.net/opinion/EE.UU.-la-OTAN-y-el-regimen-neonazi-de-Kiev-culpables-de-la-crisis-en-Ucrania-20220303-0006.html

¿Guerra en Ucrania?

¿Guerra en Ucrania?

Neonazis en Ucrania

Se deteriora la situación en Europa. Puede estallar una guerra en Ucrania y entonces es imprevisible donde se puede extender.

Los grandes medios suecos  y de otros países están creando una histeria como de que Rusia puede invadir la isla de Gotland y atacar entonces a Suecia, aparte de que siempre es "inminente" su agresión a Ucrania. Ésto es, sin duda, parte de una gran campaña organizada desde Washington para incorporar al país escandinavo a la OTAN como base de ataque a Rusia y dominar el Mar Báltico. Ésto está alentado por los políticos, fieles a las grandes empresas multinacionales suecas que aspiran a participar del saqueo de los enormes recursos naturales rusos. Hay que recordar que Suecia participó en Libia, seguramente mojando algo de los fondos libios que, después de 10 años, todavía no han aparecido y, más recientemente mandó buques de guerra a maniobras navales de la OTAN en el Mar Negro.

Como si Suecia tuviera algo que ver en esa zona de influencia!

Rusia está inquieto, con toda razón, por la cantidad de bases militares que la rodean y que realizan maniobras con su modelo como enemigo.

Como dice John Pilger 3:

"Los hechos no informados son: las tropas de Rusia están en Rusia. Las tropas británicas están en las fronteras de Rusia. Rusia está rodeada de misiles de EEUU. El gobierno electo de Ucrania fue derrocado por Obama y reemplazado por un régimen anti ruso infestado de nazis"

La táctica de asediar y dividir les ha funcionado por lo menos en dos ocasiones:
con la URSS en el '90 y con Yugoeslavia en el '99.

Esta vez la apuesta es mayor y puede conllevar una guerra atómica con la extinción de la especie humana como consecuencia, pero a ellos no les importan los riesgos y están necesitando una presa grande para contrarrestar a China y la ruina que implicaría para ellos un pacto militar-industrial-económico Rusia-China con toda su zona de influencia en Asia y hasta parte de África.

No es cierto que en noviembre de 2013, la Unión Europea, apoyada por Washington, ofreció al presidente ucraniano Viktor Yanukovych una asociación benigna con la democracia y la prosperidad europeas. No es cierto que Yanukovych estaba preparado para firmar el acuerdo, pero Putin lo intimidó y sobornó para que lo rechazara. Entonces comenzaron las protestas del Maidan de Kiev y todo lo que siguió después.

La propuesta de la UE era una imprudente provocación forzando al presidente democráticamente electo de un país profundamente dividido a elegir entre Rusia y el Occidente. Así también fue el rechazo de la UE de la contrapropuesta de Putin de un plan Ruso-Europeo-Americano para salvar a Ucrania de un colapso financiero. En sí mismo, la propuesta de la UE no era económicamente viable. Al ofrecer poca asistencia financiera, requería del gobierno ucraniano decretar medidas de dura austeridad y habría restringido agudamente su prolongada y esencial relación comercial con Rusia. Tampoco era la propuesta de la UE enteramente benigna. Ella incluía protocolos que requerían que Ucrania se adhiriera a la política "militar y de seguridad" de Europa - lo que significaba de hecho, sin mencionar esta alianza, la OTAN. Nuevamente, no fue la alegada "agresión" de Putin que inició la crisis actual sino en su lugar una especie de agresión de terciopelo por parte de Bruselas y Washington para meter a toda Ucrania en el Occidente, incluso(en texto pequeño) en la OTAN.

La guerra civil de hoy día en Ucrania no fue causada por la respuesta agresiva de Putin a las protestas pacíficas del Maidan contra la decisión de Yanukovych.
En febrero de 2014, las protestas radicalizadas del Maidan, fuertemente influidas por fuerzas callejeras de extremo nacionalismo y aun semi-fascistas, se volvieron violentas. Con esperanza de una resolución pacífica, los ministros de relaciones exteriores europeos negociaron un compromiso entre los representantes parlamentarios de Maidan y Yanukovych. Éste lo habría dejado como presidente, con menos poder, de un gobierno de una coalición por reconciliación hasta elecciones prematuras en diciembre. En unas pocas horas, agitadores callejeros violentos abortaron este acuerdo. Los líderes de Europa y Washington no defendieron su propio acuerdo diplomático. Yanukovych huyó a Rusia. Partidos parlamentarios minoritarios representando a Maidan y, predominantemente Ucrania occidental - entre otros Svoboda, un movimiento ultranacionalista previamente anatematizado por el Parlamento Europeo como incompatible con valores europeos - formaron un nuevo gobierno. Washington y Bruselas respaldaron este golpe y han apoyado sus resultados desde entonces. Todo lo que siguió, desde la anexión de Crimea por Rusia y la expansión de la rebelión en el sudeste de Ucrania a la guerra civil y la "operación antiterrorista" de Kiev, fue detonado por el golpe de febrero. Las acciones de Putin fueron predominantemente reactivas
2.


El Instituto Schiller 5

El riesgo de las mentiras de que Rusia está por invadir Ucrania abarca ni más ni menos que una guerra atómica con la consiguiente aniquilación de la especie humana.

La documentación de un dossier  del Instituto Schiller muestra una cronología de como Occidente, no Rusia, paso a paso ha escalado la presión militar sobre ésta. Ésto ha sucedido desde la disolución de la Unión Soviética sin traba alguna. El propósito se dice que es ayudar a Ucrania, pero todos deben poder comprender que la OTAN no puede expandirse sin límite sin verse obligada a confiarse completamente en las armas atómicas,

En términos puramente militares la OTAN no puede movilizar suficientes fuerzas como para medirse con lo que Rusia puede hacer en la región. Ésto fue establecido este verano pasado con las grandes maniobras militares rusas en su propio territorio con más de 100.000 soldados. Ya ahora Ucrania es sacrificada en un desorden económico dirigido por Occidente en que los oligarcas se enriquecen, mientras que los trabajadores se ven obligados a emigrar. La escalada alienta la reanudación de la guerra en Ucrania del Este que puede conducir a que el país sea completamente estropeado como punto central de una Tercera Guerra Mundial con armas atómicas.

Lo que se necesita ahora en la comprensión en Occidente, de que Ucrania no puede ser usada para conquistas militares y que el diálogo es, por lo tanto, necesario para encontrar alguna forma de coexistencia con Rusia y una solución democrática para la amenaza de extinción contra los resistentes ucranianos del Donbass al golpe.

El Donbass
Las regiones de Lugansk y Donetsk, con mayoría de su población rusa, resistieron al golpe que destituyó al presidente Yanukovich, elegido democráticamente y se declararon independientes en un plebiscito realizado en 2014.
La reacción del gobierno de Kiev fue declarar terroristas a los insurgentes y arremeter con medios militares, incluyendo artillería, lo que causó un desastre humanitario y un enfrentamiento con milicias pro rusas locales.
Con la mediación de Francia y Alemania y las firmas de Rusia, el gobierno ucraniano y representantes del Donbass se logró el llamado Acuerdo de Minsk para lograr la paz, que detuvo un avance de los milicianos sobre las tropas oficialistas.
Este acuerdo fue luego boicoteado tanto por Kiev, como por los EEUU, lo que provocó hostilidades que han proseguido todo el tiempo.
Es obvio que Rusia no va a aceptar indiferente que masacren a la población de habla rusa y a los ciudadanos rusos de la región.

Crimea
La península de Crimea en el sureste de Ucrania, aloja la base de Sebastopol, histórica en la Segunda Guerra Mundial y que hospeda a una gran parte de la flota rusa del Mar Negro.
Fue parte de Rusia históricamente, pasando a pertenecer a Ucrania en 1954, cedida entonces por el primer ministro Kruschev, de la URSS.
El 95% de la población de la península es rusa, lo que determinó que en un plebiscito luego del golpe de Maidan, se decidiera por un porcentaje similar de los votos, su incorporación a la Federación Rusa.
Es posible que uno de los objetivos del golpe, impulsado y luego apoyado por el gobierno de Washington, principalmente en la figura de la diplomática Victoria Nuland
6, fuera controlar la base de Sebastopol, maniobra que fue eludida por la incorporación de su población por medio de un plebiscito del que nadie discute su validez, a la Federación Rusa, igual que el de la península de Crimea en su conjunto.

Los países bálticos y Polonia
Las reacciones en los diferentes países de Europa varían bastante, aun entre los miembros de la OTAN.
Por un lado los países bálticos(Estonia, Letonia y Lituania) y Polonia en que se han realizado antes maniobras militares de la OTAN a metros de Rusia, en simulacros con ésta como su enemigo, se han apresurado a enviar armas al caldero hirviente que se ha vuelto Ucrania.
También en los vecinos escandinavos la prensa cipaya no ha tardado en insuflar el fantasma de la "agresión rusa inminente" cuando todo el buen sentido está indicando que el gigante euroasiático está totalmente desinteresado de ellos.
Suecia fortaleció su defensa de la isla báltica de Gotland y Dinamarca envió buques y aviones a la zona.
En cambio Turquía y Alemania prohibieron el acceso a su espacio aéreo a aviones con destino a Ucrania y esta última prohibió también a Estonia que enviara armas de origen alemán a la zona ucraniana.
Asimismo Croacia ha decidido retirar todas sus tropas de la zona de conflicto con Rusia.

Resumen
Un gran conflicto se ha encendido entre los intereses de las grandes empresas imperialistas y sus lacayos en explotar los enormes recursos naturales rusos y la línea que defiende su autonomía política y económica.
Parecería ser una de las últimas oportunidades de subsistencia de un globalismo imperialista al que ya le va quedando poco por saquear.
Siendo legítima la preocupación de Rusia por su seguridad, lo más importante para todos nosotros seres humano es que el establecimiento de una base de misiles de la OTAN en Ucrania implicaría que Moscú estaría a sólo 5 minutos de vuelo.
Vemos en ésto dos peligros enormes para la humanidad entera: por un lado que crecería la tentación del "primer golpe" por ambos enemigos y en segundo lugar que aumentaría la posibilidad de un error en que una hecatombe nuclear podría aniquilar a la especie humana entera.

Ricardo Ferré
Playa Hermosa, enero de 2022

Referencias

1. Renunció el jefe de la Marina alemana tras desatar una crisis diplomática con Ucrania por elogiar a Putin - Infobae

2. War with Russia?: From Putin & Ukraine to Trump & Russiagate
Stephen F. Cohen