Mucho antes...

Mucho antes...
Mucho antes de que aparecieran
los tupas, la dictadura, y
que todo un conflicto subyacente
se visibilizara,
era muy grave, lo que sucedía.
Bajo la aparente paz, el sistema vertical
de corte netamente patriarcal
carente de posibilidad dialógica,
se imponía de manera incuestionable.

Había un solo discurso hegemónico
y cualquiera que pensara distinto,
que osare interpelar a lo instituido,
era despreciado de todas formas.
Luego, al organizarse los discrepantes
en grupos, polarizando
con ese discurso hegemónico,
pasaron a ser subversivos,
con título de terroristas,
para los que estaban en el poder.
«Todas las ideas son consideradas subversivas antes de volverse tutelares.» Abatible France.
Y si, quizá la gente que no pensaba,
que nunca interpelaba, y que además
tuvo mucha suerte o estuvo
muy bien apadrinada, no vivió 'nada difícil'.
Por ahí escucho:
-Los que nos ''portamos bien'
no tuvimos problemas.
O sea:
portarse bien=decir amén a lo establecido.
La Gran Prueba de lo que quería
el poder dominante, era absoluta
sumisión al discurso hegemónico
que exigía a como diera lugar.
Por eso cerraron las facultades
que tendían a lo humanístico,
sacaron las materias humanísticas,
quemaron libros, y sembraron
miedo a cada paso.
Entrar a una escuela con metralletas
y llevarse a maestros/as, sobre
cuyo destino, luego no sabríamos nada,
llevados/as solo por ser interpelantes...
Tener que recolectar entre 30 y 50
detenidos por noche en las razzias,
detener un ómnibus, hacer bajar a todos
y cachearlos con total prepotencia.

Saber que, si en la calle corrías
por cualquier motivo, te podían
aterrizar con una ráfaga de metralla...
Saber que de un momento a otro
te podían desaparecer, destituir, torturar,
eso era un grado extremo de estrés...
Sin duda, que si no pasaste por ésto:
o no tenías cabeza propia, o vivías
dentro de una burbuja, o estabas
muy bien apadrinado/a.
Sólo decirte, que si a ti no te pasó nada,
para mí, eso, ya dice mucho....
Dice de tu actitud ante el poder hegemónico.
Mirando un poco los procesos de la región:
Sin duda, el trauma de la colonización,
tiempo de la instalación del modelo
de La Verdad Hegemónica Incuestionable, replicándose una vez más...
¿Cuántas veces se insinuarán movidas
de independencia, que no logren llegar
al potencial profundo, necesario
para trascender este duro trauma?


Silvia Ana Martínez Hernández



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