"Por un mundo donde seamos socialmente iguales, humanamente diferentes y totalmente libres."
Rosa Luxemburg
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"La Patria para todos" en versión oligarquía en la era del gobierno "progresista"
Integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Rurales y Afines distribuyeron volantes el sábado en la puerta de la Expo Prado. Foto: Javier Calvelo
Con tranca
ARU no dejó entrar a la UNATRA a la Expo Prado.
El sábado a las 10.00, unos 15 dirigentes de la Unión Nacional de Asalariados, Trabajadores Rurales y Afines (UNATRA) entregaban información y conversaban con la gente que pasaba por el acceso a la Expo Prado por la calle Lucas Obes. Querían dar a conocer “Lo que la ciudad no sabe del campo”; las condiciones salariales y laborales de los trabajadores rurales. Según contó César Rodríguez, vocero de UNATRA, una de las manifestantes quiso ir al baño, para lo que compraron dos entradas a la exposición y quisieron entrar al predio. El funcionario de seguridad negó el paso a los dirigentes, excusándose en el derecho de admisión de la organización, y aunque los manifestantes exigieron una explicación, “no apareció nadie”. Una hora más tarde, en el acto de clausura en el ruedo central, el presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Ruben Echeverría, aseguraba que la gremial “siempre ha velado por el bienestar de los trabajadores rurales y sus familias”, según El País.
UNATRA manifestó el “repudio absoluto” a la actitud de la ARU, aunque no le sorprende. “Ellos tienen un discurso conciliatorio con la mano de obra que contratan, pero no es para extrañarse. Cada vez que se denuncian situaciones organizadamente, tenemos actitudes de este tipo”, dijo Rodríguez. Esto pasa en plena negociación colectiva, en la que las gremiales rurales y UNATRA tienen posiciones “muy alejadas”. La ARU y la Federación Rural plantean que no haya crecimiento salarial en los tres años de convenio colectivo; sólo ajustes por IPC. UNATRA reclama que el salario mínimo suba a 14.000 pesos (actualmente un peón común cobra 7.920) y que los convenios sean más cortos. “Va a ser difícil firmar un convenio antes del 30 de setiembre”, consideró Rodríguez.
Adentro, Echeverría dedicó su discurso a criticar las políticas sociales del gobierno, la situación de la educación, la seguridad y hasta el proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Dijo que los planes sociales no deben generar “estratos acostumbrados a recibir eternamente sin dar nada de sí” y apuntó que “el trabajo dignifica”. “Hay que enseñar a pescar”, agregó. El ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre, también en el acto, respondió: “A la gente hay que contenerla, hay que educarla y hay que construir oportunidades, y no se resuelve construyendo rejas, segmentando a la sociedad”, afirmó.
La presidenta del Frente Amplio, Mónica Xavier, consideró que prohibirles la entrada a los trabajadores es algo “poco democrático”, y sobre el discurso de la ARU opinó que fueron “posicionamientos ideológicos que tienen los sectores poderosos del país”.
UNATRA manifestó el “repudio absoluto” a la actitud de la ARU, aunque no le sorprende. “Ellos tienen un discurso conciliatorio con la mano de obra que contratan, pero no es para extrañarse. Cada vez que se denuncian situaciones organizadamente, tenemos actitudes de este tipo”, dijo Rodríguez. Esto pasa en plena negociación colectiva, en la que las gremiales rurales y UNATRA tienen posiciones “muy alejadas”. La ARU y la Federación Rural plantean que no haya crecimiento salarial en los tres años de convenio colectivo; sólo ajustes por IPC. UNATRA reclama que el salario mínimo suba a 14.000 pesos (actualmente un peón común cobra 7.920) y que los convenios sean más cortos. “Va a ser difícil firmar un convenio antes del 30 de setiembre”, consideró Rodríguez.
Adentro, Echeverría dedicó su discurso a criticar las políticas sociales del gobierno, la situación de la educación, la seguridad y hasta el proyecto de ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Dijo que los planes sociales no deben generar “estratos acostumbrados a recibir eternamente sin dar nada de sí” y apuntó que “el trabajo dignifica”. “Hay que enseñar a pescar”, agregó. El ministro de Ganadería, Tabaré Aguerre, también en el acto, respondió: “A la gente hay que contenerla, hay que educarla y hay que construir oportunidades, y no se resuelve construyendo rejas, segmentando a la sociedad”, afirmó.
La presidenta del Frente Amplio, Mónica Xavier, consideró que prohibirles la entrada a los trabajadores es algo “poco democrático”, y sobre el discurso de la ARU opinó que fueron “posicionamientos ideológicos que tienen los sectores poderosos del país”.
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